vida

Con frecuencia nos enfocamos en crecer personalmente o laboralmente, pero pocas veces nos damos cuenta que ambas cosas van de la mano. A continuación te comparto 5 acciones que puedes comenzar a practicar, y si lo haces, verás que poco a poco experimentarás más tranquilidad, más seguridad, más autoconfianza y poder para resolver conflictos, menos enojo, menos frustración y en resumen, menos sufrimiento en tu vida personal y en tu trabajo.

  1. Analiza una situación desde varios ángulos.
  2. Creemos que nuestra opinión es la única que vale, pero la evaluación de lo que pasa alrededor es diferente en cada persona; ya que está determinada por nuestra historia de vida, la educación que recibimos y el estilo de pensamiento que hemos desarrollado. Así que antes de dar una conclusión, pónte en el lugar de todos los implicados y pregúntate ¿hay otra forma de ver lo que ha pasado? ¿qué otras maneras hay de hacer las cosas? ¿porqué hicieron lo que hicieron? ¿que les ha llevado a las personas a ser así, y no de la forma en que quisiéramos? Esto ayudará a tener un pensamiento más flexible y

  3. Deja de pensar y hablar sobre lo que le pasa a los demás.
  4. Cuando pensamos en el otro, casi siempre nos enfocamos en sus deficiencias y problemas, o en aquello que hacen diferente o mejor que nosotros, lo cual representa pérdida de tiempo y energía desperdiciada. Especular y enfocarse en asuntos ajenos es tóxico, y si se comparte esta opinión con los compañeros de trabajo entonces puede resultar en chismorreo y de ello no se saca nada de provecho.

  5. Actúa antes de que las cosas se compliquen.
  6. Con frecuencia podemos caer en la evasión de ciertas situaciones debido a que no sabemos cómo enfrentarlas o porque nos causan ansiedad y pensamos que es mejor posponer, dejar las cosas para cuando estemos preparados, pero la verdad es que la mayoría de las veces ese momento nunca llega por sí solo. Ten presente que cuando nos ocultamos de situaciones difíciles o de problemas, estos no desaparecen, sino todo lo contrario, tienden a crecer. Cualquier intento de evadir la incomodidad de una situación, tarde o temprano nos alcanzará.

  7. No te dejes caer por lo que pasa alrededor de ti.
  8. La mayoría de las personas creen que solo pueden estar bien si las cosas alrededor marchan bien, pero esto trae consigo el problema de que conviertas tu vida en una veleta que no tenga definido a dónde ir, cómo sentirse y qué hacer y que todo dependa de si los otros hacen o dejan de hacer. Toma la responsabilidad de tu comportamiento y de tus emociones, no le eches la culpa a los demás. Eso de: “el me hizo enojar” no aplica, tu te enojaste porque le diste poder.

  9. No esperes que te feliciten.
  10. Nos educan para esperar constantemente una felicitación o comentarios positivos cuando hacemos algo bien, y nos acostumbramos a ello, pero cuando esto no sucede nos desmotivamos, solemos despotricar, sentir que nuestro trabajo no lo valoran o incluso llegamos a pensar que de verdad nuestro trabajo no vale. Pero ojo, lo que más importa es que seamos capaces de reforzarnos y felicitarnos a nosotros mismos, de tener autoconfianza y saber lo que vale nuestro trabajo aunque creamos que los demás no lo notan. Hay que aprender a apapacharnos y cuidar de una misma. Nuevamente te recuerdo que hay que hacernos responsables de nosotras.

Si has intentado poner en práctica alguno de estos consejos y hasta la fecha no has podido lograrlo o ser constante, te recomiendo que consultes a uno de nuestros especialistas en coaching laboral de Tequeremosescuchar.com Sin duda encontrarás a alguien que te apoyará en el proceso de autoconocimiento y cambio para ser más eficiente y feliz en tu vida y tu trabajo.