¿Has pensado que la mayoría de los peligros a los que temes, suceden sólo en tu mente?
En Te Queremos Escuchar pensamos que las emociones no son malas ni negativas. El objetivo de la inteligencia emocional no es eliminarlas o evitarlas, ni sería saludable hacerlo. Un ser humano sin vida emocional no se podría conocer a sí mismo y tendría serias dificultades para relacionarse con su medio y con las personas dentro de él.
No importa donde vayas, tus emociones te acompañarán. Y estas, podrán ser tus mejores aliadas, pero también podrían convertirse en una pesadilla.
Podrían ser una pesadilla cuando no tenemos las herramientas necesarias para poder manejarlas a nuestro favor y comiencen a ser disfuncionales. Por ejemplo: podrás estar de vacaciones en la playa y enojarte porque el mesero no trae tu bebida. Podrás estar meditando y deprimirte por ver a un niño con hambre. Podrás estar en una reunión de trabajo y angustiarte porque el cliente hace gestos de desaprobación mientras tú hablas.
Es decir, somos presa fácil de nuestros sobresaltos emocionales.
Nuestras emociones aumentan su intensidad dependiendo de nuestras creencias y pensamientos, provocando en nuestro cuerpo reacciones fisiológicas, muchas veces no saludables. Las emociones cuando escalan su intensidad, son malas consejeras y pueden nublar nuestra vista.
Generamos discusiones por una mala interpretación.
Es decir, las emociones no son cosas que nos suceden sin querer. Somos capaces de generar emociones, exagerarlas y también disminuirlas. Si aún no sabes cómo sufrir menos al ser presa de ti mismo, no es porque sea imposible, sino porque quizá aún no te han enseñado cómo hacerlo.
¿Has respondido furioso diciendo o haciendo cosas de las cuales te has arrepentido?
¿Cuántas veces has dicho algo que no debías, insultado a tu jefe, pareja, a tu hijo o insultándote a ti mismo?
No te conviertas en esclavo de tus emociones, hay alternativas como la psicoterapia en línea, que pueden hacer toda la diferencia y permitirte disfrutar aún más tu vida y tus emociones a través de la inteligencia emocional.
